Para finalizar mis recomendaciones sobre la #VueltaAlCole, además de hablaros de El monstruo de colores va al cole y La ventana mágica, me gustaría dejaros mi opinión sobre Siempre pienso en ti, el cuento que en mi opinión es el más apropiado para tratar este tema y ayudarnos a expresar lo que sentimos, no solo a los niños sino también a los propios padres.

Mientras que el del monstruo de colores habla de las rutinas del cole y La ventana mágica aborda el proceso de adaptación del paso de infantil a primaria, Siempre pienso en ti trata el tema desde la perspectiva del miedo o ansiedad a la separación: El pollito no quiere separarse de su mamá y ella le explica que, aunque no estén juntos todo el tiempo, el amor que se tienen el uno al otro les acompaña durante todo el día.

Tanto las ilustraciones como el texto son muy tiernos, este último rimado, que refuerza la repetición de ese mensaje de amor, de principio a fin.

He de confesar que, hace un tiempo, a uno de mis #pequeñoslectores e incluso a mí misma, por qué no reconocerlo, este cuento nos vino muy bien. Gracias a él tuve la oportunidad de abordar esa «tristeza», esa «angustia» por la separación que mi hijo sentía todas las mañanas al quedarse en el cole y no necesitamos hablarlo directamente, para no hacer un problema donde no había más que un cambio. Él se fue acostumbrando a su nueva etapa (gracias en gran parte a la estupenda labor de la seño) y la tristeza y los miedos se fueron sin más. Aun así, muchos días cuando vamos llegando a casa después de estar en el cole, se acerca y me susurra al oído: «Hasta mañana no me separo de ti», en alusión a este cuento. Este es el gran poder de la literatura.

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