- Buenas tardes doctor, me llamo Leo. Mi mujer me ha obligado a venir. Cree que necesito ayuda. Que tengo un problema. Piensa que no tengo los pies en la tierra, que vivo en una especie de…mundo imaginario. Y, la verdad, no tengo ni idea a qué puede referirse.
-
No se preocupe, suele pasar. Recuéstese en el diván. Iremos poco a poco. Hábleme de usted, de su infancia, de sus gustos…
-
Bien. No sé qué decirle. Mi principal afición es leer. Los libros son mi mejor medio de expresión, me permiten viajar a cualquier parte. Soy un poco … tímido ¿sabe usted? .- El doctor asiente, comprensivo.- Recuerdo haber cogido un tren como Pasajero a Frankfurt y pasar primero un Invierno en París, después un Verano en la Provenza, para terminar paseando por la Misteriosa Buenos Aires. El perfume de esa ciudad es maravilloso. Conocí a Dos chicas en Shanghai que me acompañaron hasta El cementerio de Praga. Recuerdo otra, La Chica del Tren, con la que disfruté Un baile en Nairobi. Juntos pasamos noches enteras contemplando Todo Bajo el Cielo. Gracias a mis libros he conocido Un mundo sin fin, sin barreras ideológicas, sociales o de género. Infinitamente mejor que en el que vivimos. ¿No cree usted?
-
Ya veo.- el doctor carraspea, algo azorado.- Su pasión por los libros parece un poco … desmedida, aunque es difícil no dejarse llevar por su entusiasmo. ¿Querría venir a verme algún otro día? Le abriré una historia clínica. Su nombre completo es … ¿Leo?
-
Si, bueno, Leopoldo.
-
Bien. ¿Primer apellido?
-
Alas.
-
¿Segundo apellido? .- el doctor hace la pregunta despacio, mirándole fijamente. De antemano sabe la respuesta.
ME GUSTA
Me gustaLe gusta a 1 persona